Hemos visto que los nervios craneales, salvo el neumogástrico, se distribuyen exclusivamente por la cabeza y partes vecinas. Todo el resto del cuerpo se halla bajo la acción de los nervios espinales. Estos nervios suman 32 pares. Nacen simétricamente a los lados de la medula espinal, saliendo del conducto vertebral a través de los agujeros intervertebrales, vale decir que salen entre vértebra y vértebra. Una vez afuera, se distribuyen por las distintas partes del cuerpo, sobre todo por la piel y músculos del tronco y articulaciones.
LAS RAICES MOTORAS Y SENSITIVAS
Los nervios espinales salen de la medula espinal. Vemos cómo cada uno de ellos nace por dos raíces, bien diferenciadas: una ventral o anterior y otra dorsal o posterior; cada una de estas raíces está formada, como se ve, por un fascículo de finas fibras, que después constituyen una raíz única. Sigamos observando: la raíz ventral parte de la cara anterior de la medula espinal y aparece integrada por fibras que nacen del "cuerno anterior" de la sustancia gris medular.
La raíz dorsal sale de la cara posterior de la médula y está formada por fibras que se distribuyen en el cuerno posterior de la sustancia gris. Apenas salidas de la medula, las raíces ventrales y dorsales se unen para formar un único nervio y salir entonces del conducto vertebral. Las fibras nerviosas que parten del cuerno anterior medular son fibras motoras, mientras que las que terminan en el cuerno posterior son fibras sensitivas; es fácil entonces comprender que la raíz anterior será motora y la posterior, sensitiva. Naturalmente, cuündo a la salida del conducto vertebral ambas raíces se unen, el nervio raquídeo resultante será un nervio mixto y, en él, la corriente nerviosa circulará en ambos sentidos: centrípeto y centrífugo.
LOS DOS RAMOS Y LA INERVACIÓN
Apenas salidos del propio orificio intervertebral, cada nervio espinal se divide en dos ramos, siempre mixtos: el ventral y el dorsal. El primero, más grande e importante, se dirige hacia la parte anterior del cuerpo y se divide poco a poco en una multitud de ramas que se distribuyen por la piel y los músculos de la parte lateral del cuello y los de la parte anterior del tronco y abdomen. En ciertas zonas, las ramas se unen entre sí antes de distribuirse para formar los llamados plexos nerviosos. La rama dorsal se dirige hacia atrás y se distribuye por la piel y músculos de la nuca y dorso.
LAS RAICES MOTORAS Y SENSITIVAS
Los nervios espinales salen de la medula espinal. Vemos cómo cada uno de ellos nace por dos raíces, bien diferenciadas: una ventral o anterior y otra dorsal o posterior; cada una de estas raíces está formada, como se ve, por un fascículo de finas fibras, que después constituyen una raíz única. Sigamos observando: la raíz ventral parte de la cara anterior de la medula espinal y aparece integrada por fibras que nacen del "cuerno anterior" de la sustancia gris medular.
La raíz dorsal sale de la cara posterior de la médula y está formada por fibras que se distribuyen en el cuerno posterior de la sustancia gris. Apenas salidas de la medula, las raíces ventrales y dorsales se unen para formar un único nervio y salir entonces del conducto vertebral. Las fibras nerviosas que parten del cuerno anterior medular son fibras motoras, mientras que las que terminan en el cuerno posterior son fibras sensitivas; es fácil entonces comprender que la raíz anterior será motora y la posterior, sensitiva. Naturalmente, cuündo a la salida del conducto vertebral ambas raíces se unen, el nervio raquídeo resultante será un nervio mixto y, en él, la corriente nerviosa circulará en ambos sentidos: centrípeto y centrífugo.
LOS DOS RAMOS Y LA INERVACIÓN
Apenas salidos del propio orificio intervertebral, cada nervio espinal se divide en dos ramos, siempre mixtos: el ventral y el dorsal. El primero, más grande e importante, se dirige hacia la parte anterior del cuerpo y se divide poco a poco en una multitud de ramas que se distribuyen por la piel y los músculos de la parte lateral del cuello y los de la parte anterior del tronco y abdomen. En ciertas zonas, las ramas se unen entre sí antes de distribuirse para formar los llamados plexos nerviosos. La rama dorsal se dirige hacia atrás y se distribuye por la piel y músculos de la nuca y dorso.