Tejidos transparentes del ojo
A pesar de su diseño básicamente sencillo, la construcción del instrumento representado por el ojo humano requirió de millones de años de evolución. En ese largo camino, la naturaleza debió resolver una enorme cantidad de problemas biológicos. A modo de ejemplo, veamos algunos de ellos. Un primer problema es cómo lograr tejidos transparentes e incoloros al paso de la luz. Para ello, una de las medidas consistió en generar tejidos avasallares, es decir, que no están atravesados por vasos sanguíneos.
Casi todos los tejidos del organismo son vascularizados, están atravesados por vasos sanguíneos que transportan la sangre que los nutre. El pasaje de estos vasos y el color rojo de la sangre contribuyen a opacificar y dar color los tejidos.
En el caso del ojo, la nutrición de los tejidos transparentes se realiza por difusión a distancia de los componentes de la sangre. Para ello evolucionaron mecanismos fisiológicos muy complejos.
A pesar de su diseño básicamente sencillo, la construcción del instrumento representado por el ojo humano requirió de millones de años de evolución. En ese largo camino, la naturaleza debió resolver una enorme cantidad de problemas biológicos. A modo de ejemplo, veamos algunos de ellos. Un primer problema es cómo lograr tejidos transparentes e incoloros al paso de la luz. Para ello, una de las medidas consistió en generar tejidos avasallares, es decir, que no están atravesados por vasos sanguíneos.
Casi todos los tejidos del organismo son vascularizados, están atravesados por vasos sanguíneos que transportan la sangre que los nutre. El pasaje de estos vasos y el color rojo de la sangre contribuyen a opacificar y dar color los tejidos.
En el caso del ojo, la nutrición de los tejidos transparentes se realiza por difusión a distancia de los componentes de la sangre. Para ello evolucionaron mecanismos fisiológicos muy complejos.