El óvulo humano es una célula de una a dos décimas de mm, su forma es esférica y tiene una membrana gruesa llamada vitelina, además un protoplasma que se llama vesícula germinativa con uno o incluso más nucleolos y dos centrosomas. Cuando está de esta forma el óvulo no es apto para la fecundación por lo que para serlo deberá pasar por una reducción cromática o lo que se conoce también como maduración. El núcleo debe dividirse mediante una carioquinesis, en la que el filamento se fracciona. Las transformaciones que protagonizan los diferentes grupos de cromosomas harán que se considere al óvulo como maduro. Además desaparecerán los dos centrosomas del núcleo cuando este pueda ser fecundado.
muy incompleto.o bueno sie esp oara la segundaria esta mas imenos considerabñe
ResponderEliminaresta perfecto coincido con que te calles
Eliminaresta perfecto me sirvio mucho coincido con que te calles
Eliminare parece magnifico y callate la boca anonimo
ResponderEliminar